MADRID.- Sólo una presentación de jerarquía de Barcelona podía frustrar un comienzo de Liga como el que traía Real Madrid, que llegaba como favorito al clásico español producto del liderazgo absoluto en la tabla y una racha de 15 victorias consecutivas.
Tras un inicio fatídico -recibió un gol a los 22 segundos-, Barcelona consiguió una reacción anímica y futbolística para volver a poner en orden la disputa por ser el equipo del momento. Con una productiva actuación de Lionel Messi, el conjunto catalán se impuso 3 a 1 en el estadio Santaigo Bernabéu y, aunque tiene un partido más, igualó al Madrid en la cima.
La victoria blaugrana se construyó de menor a mayor, con paciencia y siempre respetando su esencia. Apenas comenzó el partido se vio sorprendido por un asfixiante pressing de Real Madrid, que generó un error grosero de Vítor Valdés. Benzema estuvo atento para pescar el rebote y, con apenas 22 segundos, puso el 1-0.
Pero, aunque siguió sin poder desplegar su fútbol exquisito de toque y desmarque por un inteligente posicionamiento de los merengues en el campo, Barcelona encontró la igualdad a los 29 minutos por una iluminación de Messi, que arrastró dos marcas y habilitó a Alexis Sánchez -de gran partido-, que definió con un derechazo cruzado.
Si bien tuvo fortuna en el segundo tanto -un remate de Xavi se desvió en Marcelo y desconcertó a Casillas-, Barcelona fue dueño absoluto del complemento: Inista, Xavi, Messi y Dani Alves aceitaron su juego y enloquecieron a Marcelo, Pepe y Sergio Ramos. Real Madrid abandonó la presión y, aun en desventaja, siguió jugando al contraataque. Cristiano Ronaldo, para colmo, tuvo una pésima noche: falló dos goles frente al arco (uno de derecha y otro de cabeza, ambos de frente a Valdés).
Con el 3-1, Barcelona coronó la fiesta en casa ajena. Con su sello, cerró el partido: Messi comenzó la jugada en mitad de cancha, habilitó a Dani Alves, que desbordó a Marcelo una vez más y, en un centro prolijo, encontró la cabeza de Fábregas, que había estado opacado pero cumplió en el final.
Con este valioso triunfo, el conjunto de Pep Guardiola se marcha como líder a Japón para disputar el Mundial de Clubes. Adelantó su partido de la 16a jornada al ganarle 3-0 a Rayo Vallecano. Real Madrid tendrá una dura visita a Sevilla, en siete días, para volver a recuperar la cima antes del receso invernal europeo.
Fuente La Nación.ar
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