El asesino de Oslo solo pudo hablar dos veces con la autoridad y pidió una confirmación de que se había aceptado su propuesta, dice su abogado.
Anders Behring Breivik, el autor confeso de los atentados que dejaron 77 muertos en Noruega, aseguró que llamó a la Policía 10 veces antes de su arresto en la isla de Utoeya, manifestó su abogado Geir Lippestad al diario Aftenposten.
Breivik contó a la Policía que los llamó por teléfono, pero solo pudo comunicarse dos veces. En sus llamadas, se identificó a sí mismo como“comandante y utilizó su nombre completo”, dijo Lippestad, añadiendo que quería entregarse y “utilizó la palabra ‘rendirse’, pidiendo a la autoridad que confirmara que lo aceptaba”.
Lippestad alegó que Breivik llamó para asegurarse de que los uniformados no dispararían en su contra. Mientras llamaba, cesó de disparar contra los jóvenes del campamento. Entonces pensó en suicidarse o seguir con “su operación y decidió continuar hasta que la Policía llegara”, añadió el letrado.
Testigos confirmaron que hubo una pausa en el tiroteo antes de continuar, lo que podría cuadrar con el relato de Breivik, afirma el diario Aftenposten. La Policía aseguró que tiene una grabación que podría ser de Breivik, aunque no confirmó que hizo las llamadas, dijo un portavoz al diario.
Fuente Perú 21
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